Federación de Enseñanza de CCOO de la Región de Murcia | 19 abril 2024.

CCOO EXIGE QUE EL CONSEJERO DE HACIENDA INCLUYA EL PAGO DE LA DEUDA CONTRAÍDA CON LOS CENTROS EDUCATIVOS EN EL USO QUE DARÁ A LOS FONDOS TRANSFERIDOS POR MADRID.

    11/11/2013.

    El Gobierno regional recibe en estos días 230 millones de euros remitidos por el Gobierno central para el pago de deudas del gobierno regional con sus proveedores. CCOO exige que se incluya la deuda que se mantiene con los centros públicos de la región.

    El Gobierno regional tiene contraída, paralelamente, una deuda con los centros educativos públicos de la región consistente en el 40% de la partida de gastos de funcionamiento de 2011, del 70% de la partida de FP de 2011 y del 25% de la de gastos de funcionamiento de 2012.

    El proyecto de presupuestos regionales para 2014 no incluye cantidad alguna para el abono de esta deuda.

    Por estas razones CCOO reclama del Consejero Bernal que incluya el pago de las cantidades adeudadas a los colegios e institutos en el uso que haga de los 230 millones de euros procedentes del Ministerio de Economía y Hacienda, lo que en principio -y de forma inexplicable para el sindicato- no está previsto.

    CCOO no entiende que el Gobierno regional no incluya en el Plan regional de Pago a Proveedores las deudas contraídas con los centros educativos públicos (que han visto seriamente afectadas sus cuentas y que sufren múltiples dificultades que podrían conducirles incluso al colapso económico). La situación es más llamativa e incomprensible si se tiene en cuenta que durante los años en los que se han acumulado los incumplimientos con los centros públicos la Consejería de Educación ha pagado íntegramente las partidas de gastos de funcionamiento correspondientes a los centros privados concertados.

    CCOO rechaza que el pago de esta deuda no se haya presupuestado, y considera inaceptable que existiendo liquidez ?gracias a la transferencia de Hacienda- tampoco se incluya en el destino de los fondos estatales.

    CCOO considera que esta es una ocasión propicia para demostrar que el autoproclamado compromiso gubernamental con la educación pública no es solamente de boquilla sino que se traduce en hechos.